
La Martinuca nace de un sueño común para unos locos aventureros enamorados del buen comer. Necesitábamos tener fácil acceso al plato referente de nuestra gastronomía cuándo y dónde quisiéramos. Además, confiábamos en que se podía comer una tortilla de patata deliciosa y saludable, es decir, disfrutar del sabor auténtico de las tortillas de antaño gracias a los mejores alimentos; ecológicos, frescos y de temporada.
Por ello decidimos echarle huevos, era momento de volver al origen, nuestro origen, y le preguntamos a la abuela Martina por la receta de sus tortillas. Fue rotunda en su explicación; “Si queréis hacer mi tortilla de patata tenéis que obtener los mejores ingredientes. Una vez los tengáis os diré cómo conseguir esa jugosidad tan característica”. Decidimos recorrer todo el territorio nacional en busca de los mejores productores locales bajo una clara premisa: Encontrar elaboradores con una producción sostenible, que respetaran el entorno sin alterarlo y que no emplearan aditivo alguno. Conseguimos dar con ellos y tras más de un año de gestación, nos reunimos con Martina y con nuestro amigo y chef Joaquín. No fue sencillo pero tras varias pruebas pudimos elaborar lo que en palabras de la abuela Martina fue; “La tortilla como antes”.